La Ratita Presumida

Había una vez una ratita que vivía en una pequeña casa en el campo. Un día, mientras barría la entrada, encontró una moneda de oro brillante. La ratita, muy emocionada, pensó: “¡Con esta moneda podré comprar algo bonito para verme más guapa!”. Así comienza el clásico cuento para niños «La Ratita Presumida».

La gran decisión

La ratita fue al mercado y, después de mucho pensar, compró un lazo rojo para adornar su cola. Cuando volvió a casa y se puso el lazo, se miró en el espejo y exclamó:

—¡Qué bonita estoy! ¡Ahora todos querrán casarse conmigo!

Pronto comenzaron a llegar pretendientes a su puerta. Primero vino el gallo.

—Ratita, ratita, tú que eres tan bonita, ¿te quieres casar conmigo?

—¿Y qué harás por las noches? —preguntó la ratita.

—Cantaré quiquiriquí, quiquiriquí.

—¡Oh, no! Me asustarás y no podré dormir.

El gallo se marchó, y luego llegaron otros animales como el cerdo, el perro y el burro, pero ninguno logró convencerla.

La llegada del gato

Finalmente, llegó un gato elegante y astuto.

—Ratita, ratita, tú que eres tan bonita, ¿te quieres casar conmigo?

—¿Y qué harás por las noches? —preguntó la ratita.

—Dormiré tranquilamente junto a ti, sin hacer ruido.

La ratita pensó que el gato era el mejor pretendiente y aceptó casarse con él. Sin embargo, el gato tenía otros planes. En realidad, quería comérsela.

El desenlace

El día de la boda, mientras el gato preparaba la cena, la ratita comenzó a sospechar de sus intenciones. Miró dentro de la olla y vio que no había comida, sino utensilios para cocinarla a ella. Con astucia, escapó de la casa y nunca más volvió a confiar en palabras bonitas sin conocer las verdaderas intenciones de quien las dice.


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La moraleja del cuento

El cuento para niños de la Ratita Presumida nos enseña a ser cuidadosos con las apariencias y a no dejarnos llevar por halagos vacíos. También nos recuerda la importancia de valorar la sinceridad por encima de la superficialidad.

Conclusión

«La Ratita Presumida» es un cuento para niños divertido y educativo que enseña valiosas lecciones sobre la precaución y el valor de la autenticidad. ¡Compártelo con los pequeños para disfrutar de una historia llena de encanto y sabiduría!

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